Bajaba un día por la Gran Vía, un día de entresemana, a eso de las dos y veo que del coche de atrás baja un señor, se acerca a mi coche y pega en la ventanilla del copiloto:
- ¡Toc, toc! Hola buenos días, ¿me podría decir si hay por aquí cerca una barbería, que me quiero afeitar?
- Si claro, contesté.
- Ok, espera un momento que le digo a mi mujer, que va en el coche de atrás, que nos siga y me monto con usted.
Aunque no tenía muy claro donde había una barbería, siempre hay que contestar que lo sabes, e inmediatamente ponerte a averiguarlo. Así que lo pregunté por la emisora -ese aparato que nos saca de tantos apuros a los taxistas.
Para hablar por la emisora nosotros hablamos con códigos, así, cada taxista es un terminal y cada terminal es un código. La central es otro y las consultas más frecuentes también tienen código.
- 230 a 03 -el 230 es mi código y el 03 el jefe de servicio- le pregunté al jefe de servicio.
- Le recibo 230.
- ¿Me podría decir si hay alguna barbería abierta a estas horas por la zona del centro?
- ¿Una barbería? Si claro, la de Domingo Ram la tiene abierta 24 horas, si no igual en Francisco Vitoria con San Vicente Mártir, aunque a estas horas no lo sé y si no ya la sala Euro.
Y es que otro de los códigos que utilizamos en la radio es llamar a los clubs de alterne, peluquerías o barberías.
- No, que se quiere cortar la barba y además nos va siguiendo su mujer, le contesté.
No hay comentarios:
Publicar un comentario